EL LADO OSCURO DE LA FUERZA

El sexteto de Gothic Metal recala el sábado en Sedaví, dentro de la gira de presentación de "Big Open Wound", un trabajo contundente y melódico a partes iguales, que tiene todos los números para abrirles las puestas del mercado internacional.

Llevan ya unos años trabajando, pero es ahora, coincidiendo con la publicación del cd "Big Open Wound", cuando Nadir parecen estar en disposición de dar el paso que haga de ellos un referente en la escena metálica nacional. Para lograrlo, además de las canciones, cuentan con el bagaje de su pasado en otras bandas y su actual definición estilística.
"El grupo nace a partir de la separación de Obscure, entre 1994 y 1995. Aunque desde el principio estaba clara la línea a seguir, hubo algunos cambios de formación hasta llegar al grupo actual. Empezamos haciendo Doom más melódico, pero ahora estamos en una etapa en la que hay mayor predominio de las canciones".
Una de las razones fundamentales por las que han conseguido un sonido característico es la utilización de dos bajos. "Fue una opción escogida desde el principio, cuando empezamos a ensayar las primeras canciones. Dado que habíamos optado por una música más lenta y grave, pensamos que con una buena distorsión de bajo y unos buenos efectos nos desmarcaríamos de ese metal trillado basado en las dobles guitarras y en las voces, del que estábamos bastante hartos. Incluso, al principio, la idea era tener dos bajos y prescindir de la guitarra, pero había cosas que se quedaban demasiado indefinidas. De lo que se trata es de cuestionar el papel preponderante de la guitarra en el género y de buscar más la melodía que en el Death Metal, aunque sea un estilo que también nos gusta. Las canciones tienen estribillo, pero lo hace el bajo, lo cual les da un toque más lánguido."

Así han acabado por definir su sonido con una ristra de términos, Sick Gothic Doom Metal, que requiere una explicación para el oyente no iniciado. "Hemos llegado a decir que hacemos Doom Punk, por la puesta en escena. Pero bueno, lo de Sick viene porque las canciones se basan en una temática enfermiza sobre las bajezas de la condición humana. En un principio era Doom, y punto, pero ya se iban intuyendo melodías cercanas al gótico, y ahora estamos a caballo entre el gótico y el doom no escolástico, aunque nos ha sorprendido que nos estén comparando con Fields Of the Nephilim"

Sin Embargo, no es raro, ya que, como Moonspell, han sabido asumir influencias de corte siniestro que inicialmente no estaban asociadas al metal. "Hay un poso, es cierto. Hace años no escuchábamos, e incluso criticábamos, a grupos de Death rock que, ahora, nos parecen interesantes. Pero no todos en el grupo estamos en la misma línea, escuchamos cosas muy deiversas. Las melodías remiten al rock gótico, pero los acompañamientos son muy variados. Tendemos a un cierto barroquismo melódico."

También les distinguen sus letras, con un interés especial por el lado oscuro de la naturaleza humana. "Tenemos una visión bastante negativa de las cosas, pero es los que vemos a nuestro alrededor. Los textos tienen un carácter misantrópico, giran en torno a la falta de calidad en el ser humano. Y también nos sirven para exorcizar fantasmas personales".

Sólo falta que un sello decida apostar en serio por ellos. Y podría no ser español. "Enviamos "Fall From Grace", nuestra primera maqueta, a diversas revistas especializadas europeas y las reacciones fueron muy positivas, destacando que éramos un grupo con muchas posibilidades. Ahora hay dos distribuidoras, en Holanda y en Bélgica, interesadas en editarnos algo. De hecho, cuando recibieron el disco no se creían que no tuviéramos contrato discográfico.

Eduardo Guillot